Ya es una realidad, desde el 1 de junio las viviendas deben ser más
eficientes y para ello contar con un certificado energético igual que los electrodomésticos.
Con esto se pretende reducir la contaminación y ahorrar de energía.
Esta normativa se aplica a viviendas ya construidas y se exigirá a la
hora de vender o alquilar una vivienda
Así es la etiqueta..
Para
mejorar esta clasificación se deberá actuar sobre el consumo energético de la
vivienda mediante mejoras del aislamiento, calderas más eficientes, sistemas de
climatización más eficientes.
La normativa, que ya existe en España para los edificios de nueva
construcción desde el RD 47/2007 del 19 de enero, establece que a partir
de 1 de junio de 2013 será obligatorio poner a disposición de los
compradores o arrendadores de edificios o de parte de los mismos
(siempre que los alquileres tengan una duración superior a cuatro
meses), un certificado de eficiencia energética.
Este certificado evaluará la eficiencia energética del inmueble
(edificio entero o parte del mismo), otorgándole una calificación en una
letra que variará de la A a la G. El documento tendrá una validez de 10
años. Además de la información objetiva sobre sus características
energéticas, el certificado deberá incluir recomendaciones para la
mejora de la eficiencia energética del inmueble. El objetivo de la
medida es fomentar el ahorro y la eficiencia, así como que se pueda
valorar y comparar los edificios, con el fin de favorecer la promoción
de aquellos que tengan alta eficiencia y las inversiones en ahorro de
energía.
Se calcula que esta normativa conllevará ahorros anuales de
aproximadamente 32.000 tep, suponiendo que se realizaran actuaciones de
mejora de la eficiencia energética en un 10% de los edificios
certificados y se consiguiera un ahorro medio de un 20% con las medidas
que se adopten.
Ademas, recientemente
ha salido un nuevo plan de ayudas económicas para las mejoras energéticas de
viviendas y edificios.